En cuanto a los ánades reales (Anas platyrhynchos) sigue la tendencia positiva de asentamiento en el parc, alcanzándose un total de 35 ejemplares, la mayoría descansando en las pasarelas de cemento más cercanas al puente de madera, mas a salvo de incursiones perrunas.
Cabe resaltar la ya casi desaparición de libélulas por el descenso de las temperaturas. Y la carencia de aves ya más habituales en estas fechas en cuanto a sus cuantías. Sí que han llegado algunos mosquiteros comunes (Phylloscopus collybita), petirrojos (Erithacus rubecula) y currucas capirotadas (Sylvia atricapilla), pero muy por debajo de números de otros espacios menos litorales o para la misma fecha del parc en otros años. Sí que se observan otras regulares de cuantía escasa, como la lavandera cascadeña (Motacilla cinerea), el zorzal común (Turdus philomelos) y el "habitual" chochín (Troglodytes troglodytes) -generalmente uno- que lleva ya reclamando bastantes días en el parc. El martín pescador (Alcedo atthis) se ha asentado y cada vez se muestre más confiado. En el estanque se mueven pocas lavanderas blancas (Motacilla alba) que parecen las residentes... Se dedican a expulsar a la cascadeña y a otras aves que pretenden beber... Así ocurre con mosquiteros y con los jilgueros (Carduelis carduelis), pocos, mostrando uno de ellos una flamante, casi brillante, anilla metálica oficial. Es la primera vez que veo a un ejemplar de esta especie anillado en el parc. Por último, el incivismo sigue campando a sus anchas... Alguien ha destruido y esparcido un cojín de espuma en el estanque y el viento ha dispersado los restos de espuma...
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