Es aún de noche, sobre las 07:10 y en la plaça Catalunya de Barcelona, media docena de petirrojos (Erithacus rubecula) toman posiciones. emitiendo reclamos de contacto y cantos. Acaban de llegar a esta plaça, ya que ayer tan solo había uno... De entre las ramas retorcidas de las encinas, se oyen reclamos de contacto de otra media docena, en este caso, zorzales comunes (Turdus philomelos)... Otros recién llegados y que deben tener más cuidado con los edificios del centro de la ciudad, plagados de cristaleras, donde suelen morir por colisión (ver blog de colisiones, ayer nos enviaron otra...). Pero si nos dejamos llevar por el más potente canto, reclamo o en este caso, fricción, acabaremos localizando a un grillo que lo emite haciendo raspar sus patas posteriores con sus alas anteriores. El grillo, grillea, ya que es un verbo admitido. Y mientras grabo con el móvil estas audiciones a ciegas, aparece en la escena un ratoncillo osado que sale al descubierto desde la vegetación... Ahora un gracioso ratoncillo, dentro de poco una asquerosa rata...
viernes, 25 de octubre de 2019
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