LOS LINOS DE NUEVA ZELANDA SE MUEREN

Este año, por primera vez, el cordón protector de linos de Nueva Zelanda (Phormium tenax) del estanque  naturalizado del parque se está muriendo. Muchas de estas plantas yacen ya secas, muertas. Este es el primer año que ocurre esto en los 20 del parc. Y es bastante probable que sea debido al incremento de temperaturas. El cambio climático acaba hasta con estas plantas resistentes, al menos en teoría. Tampoco hay que obviar que este estanque lleva seco varios años. La lámina de agua no solo ha desaparecido de la periferia, sino que la cubeta no acoge prácticamente agua. Después de las lluvias de hace unos dìas, muy puntuales pero  copiosas, la cubeta solo alberga un triste charco. Y este punto, que era el más fresco con diferencia de todo el parc ha dejado de serlo. Las aves acuáticas anunciadas a bombo y platillo en el rótulo del Ajuntament ya no están. Las libélulas, abundantes en ocasiones, ni una. Un caballito del género Lestes se ha extinguido. Hasta la común y adaptable mariposa Pararge aegeria ya no se localiza. Y de que no hay lámina de agua que atempere la zona, no se encuentra justificado por el cambio climático. Se justifica por el abandono de los gestores del Ajuntament, que no saben, no pueden o no quieren mantener esa lámina de agua, tal y como ha estado hace años, dando ese frescor tan necesitado y que hacía disminuir la temperatura en más de 5 grados celsius. Eso sí, el Ajuntament se llena la boca publicitariamente, sobre contener la crisis climática o publicitar refugios climáticos, cuando son los primeros en no dar ejemplo y potenciar por omisión el aumento de temperaturas. ¿Qué han hecho al respecto? Colocar un rótulo en este desastre ambiental que lo define como "Bassa temporal". Así justifican, manoseando la el concwpto conservacionista, la inexistencia de agua. Una bassa "temporal" debería tener de vez en cuando (temporal, insisto) una lámina de agua. Y no es el caso. Si el Ajuntament pretende que esta balsa se llene con agua de lluvia, esperemos que no ocurra, ya que ese hecho significaría graves inundaciones en la ciudad. 

Explicada la situación de este secarral, hay que recalcar que no solo han muerto estos linos de Nueva Zelanda. La ya peremne falta de agua ha supuesto la muerte de algún ciprés de pantano y el estrés hídrico de los restantes. Debemos sumar la pérdida de casi toda la vegetación palustre, formada básicamente por carrizo, Phragmites. La vegetación acuática ha sido sustituida progresivamente por otra mucho más ruderal y oportunista. Un verdadero proceso de regresión de un espacio teóricamente acuático. La falta de lámina de agua, permite el acceso de personas y perros sueltos, acuciada por la muerte y secado de los linos que antes perimetraban la cubeta.

Esta muerte de linos da lugar a otras consecuencias ornitológicas. Disminuirá ostensiblwmente la producción de semillas del lino que son aprovechadas en exvlusiva por el pinzón vulgar en invierno. Es Diagonal Mar uno de los pocos puntos litorales del litoral urbanizado Condal donde puede observarse regularmente en invierno, a excepción de Montjuic.

Y ya entrados en mayo, cuando la floración del lino engalanaba el perímetro del estanque, muchas aves aprovechaban el néctar azucarado. Gorriones comunes, herrerillos comunes y currucas cabecinegras han aprendido a aprovechar este recurso. Y enseñan a sus jovenes volanderos a saborearlo, lo que quizás aumente el éxito reproductor en esos jóvenes. Azúcares abundantes y de fácil acceso. Quizás el año que viene, esto ya no sea así.

Y es que, tras la existencia de flora alóctona ornamental, pueden establecerse mecanismos complejos que benefician a la avifauna residente. Y todo ello sin olvidar que la floración de los linos justificó quizás su plantación por esa belleza. Ahora, el lugar parece devastado, sin agua y abandonado.