Ayer localicé por su reclamo y observé desde el puente de madera al primer ruiseñor bastardo (Cettia cetti) postnupcial. Estos ejemplares suelen quedarse a pasar todo o parte del invierno, no más de dos, porque el espacio tiene poca vegetación acuática y cada vez menos si nos fijamos en el estanque. Y de una de las Wasingtonias plantadas cerca del puente, salía en vuelo una hembra de curruca capirotada (Sylvia atricapilla), también la primera postnupcial. En cuanto otra aves más transaharianas, a pesar de la óptima climatología, tan solo un papamoscas cerrojillo (Ficedula hypoleuca). En el lago, otra gran gaviotada de reidoras (L. ridibundus), como mínimo 374 Ejs. Hasta que llegó un padre "progre" que determinó que toda chavalería podía corretear y subirse en los tubos. Siguen los 2 martines pescadores (Alcedo atthis) y la garza real (Ardea cinerea). Encuentro una cotorra de Kramer (Psittacula krameri) muerta bajo un pino.
domingo, 25 de septiembre de 2022
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