Esta mañana ha pasado por algunos nidos de avión común (Delichon urbicum) que requieren de un "especial seguimiento". Me refiero a unos que hay en unos apartamentos turísticos del passeig Calvell, donde cada año crían y donde cada año, el nido desaparece y en su lugar aparece un espantapájaros. Colocan un artilugio móvil metálico en el lugar del nido. A este efecto, ya comuniqué lo sucedido a Agents rurals que se personaron y hablaron con los propietarios el año pasado. Es importante recordar esta situación, porque este año, se les han metido nada menos que 7 nidos, 4 en un edificio y 3 en otro. Un aumento considerable, debido al traslado quizás de algunas parejas desde los edificios Tupolev, unos cercanos, donde cada año crían, pero donde tienen similares problemas. Además, este año, parcs i jardins de l'Ajuntament de Barcelona, ha instalado con acierto a pocos metros de estos nidos un fangar, destinado a que tengan más fácil la recogida del barro. Una buena iniciativa que debería ser complementada con el seguimiento de estos nidos que ya voy haciendo yo, desinteresadamente. Es importante una recomendación que nace de mi práctica. Todo conservacionista que crea que un nido puede estar en peligro por diferentes motivos, es recomendable que se realice una foto del nido en cuestión y de la fachada al completo. Las fotos llevan el exif correspondiente con la fecha o bastantes cámaras dan la opción de recoger en la misma la fecha. Va bien a efecto de prueba por si luego desaparecen estos nidos y se debe de informar a rurales. Lo primero que te preguntarán es si has visto como los tiraban. Pero eso es una casualidad que lo veas. No puedes estar todo el día vigilando un nido. Pero puedes demostrar con las fotos que en una fecha de cría estaban allí y luego ya no.
martes, 23 de julio de 2019
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