Ayer, acompañado de nuestros amigos Mario y Pepe Liarte realizamos un paseo por el parc de Sant Martí. La zona, lleva años destruida... Desde que se iniciaron y se paralizaron las obras del AVE gran parte del espacio se ha reducido y sigue en una parálisis permanente. Debemos sumar las adecuaciones del Ajuntament a un gran pipi can que parece se ha paralizado en sus obras, lo que deja un espacio muy residual a que las personas puedan "disfrutar" de la zona. Anterior a todo ello, el parc estaba constituido por espacios de césped abierto en forma de lomas sinuosas y vegetación dispersa, más un pequeño estanque, lo que atraía a cierta ornitofauna...De todo esto no queda nada, a excepción de los nidos de cotorras argentinas (Myiopsitta monachus) en las grandes farolas circulares que iluminan el espacio. A pesar de todo esto, la zona es interesante para ver aves, ya que se encuentra anexa a las vías de la Sagrera que utilizan la depresión del terreno que conecta la cuenca del Besòs con el centro de la ciudad y por lo tanto con el litoral. Pudimos ayer localizar a 2 mosquiteros musicales (Phylloscopus trochilus), cercanos al reclamo de un papamoscas cerrojillo (Ficedula hypoleuca). En la vegetación cercana a la masia de Can Cadena, por su reclamo, insistimos y vimos a un carricero común (Acrocephalus scirpaceus), mientras una gaviota patiamarilla (Larus michahellis) se zampaba a un paloma en el tejado de la masía. También 2 cotorras de Kramer (Psittacula krameri) en la misma plaza del parc. Mario y Pepe Liarte habían visto también el día anterior a un colirrojo real (Phoenicurus phoenicurus) en los huertos de la masía. Y a las 2 cotorras de cabeza roja (Aratinga mitrata) que, muy acarameladas, no se mueven hace unos 2-3 meses de la misma zona de este barrio.
miércoles, 29 de agosto de 2018
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