Cuando cae la noche y el calor sigue siendo manifiesto, es mejor darse un paseo... Y como no, el parc te puede deparar sorpresas... En el lago menor o inferior, casi seco, más de una docena de aviones comunes (Delichon urbica), más 2 golondrinas (Hirundo rustica) y una decena de murciélagos se aprovechan de los insectos que pululan sobre la superficie. Se unen a ellos, a pesar de la ya escasa luz, una libélula Anax imperator y una lavandera blanca (Motacilla alba). Me desplazo al lago mayor, donde apenas quedan gaviotas, una decena de reidoras (Larus ridibundus), entre las que destaca una joven, la primera de este año. Van llegando audouin (Larus audouinii), hasta 5 que se posan para beber principalmente y remojarse un poco. Una se posa por momentos en los tubos metálicos, bajo los cuales van pasando en diferentes momentos 4 garcillas bueyeras (Bubulcus ibis). Un par de garcetas comunes (Egretta garzetta) se pelean por el lago, o mejor dicho, el adulto expulsa al joven repetidamente. Se oye un reclamo en el cielo oscurecido... Aparecen en evuelo 3 garzas reales (Ardea cinerea). La primera, se posa en los tubos a "observar el panorama"... La segunda sigue en vuelo hacia el Besòs y la tercera, después de dar un par de vueltas, se acaba marchando también al Besòs. La garza se queda mirando la vegetación, como esperando a que cierren el parc para iniciar sus pesquisas tróficas...
sábado, 15 de julio de 2017
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