Llevamos algunos días ya con la presencia de un martín pescador (Alcedo atthis) asentado en el parc. Y en ocasiones se observa un segundo ejemplar. Entre ambos hay rivalidad y cuando se observan se expulsan uno a otro. Esta situación ya se dio el año pasado entre un macho y una hembra, acabando con un reparto de territorio. Pero este año son dos machos y no parece que quieran llegar a acuerdo alguno. El domingo pasado la rivalidad llegó a tanto que, estando yo en la zona de chopos, algo alejado del agua, uno de los ejemplares atacó a otro y le hizo huir, posándose luego, a escasos cinco metros míos al descubierto, muy excitado, respirando con el pico abierto... Ni me miraba, tan solo buscaba al oponente. A la mínima que me moví, pasados 5 mágicos segundos, el ave se dio cuenta de mi cercana y peligrosa presencia y salió en vuelo. Pero no acabaron ahí los enfrentamientos entre los machos. Aproximadamente 30 minutos más tarde, se volvieron a perseguir a "cielo abierto" por mitad del lago mayor. Uno de ellos, que parecía en retirada, viró hacia los cipreses de pantano, quizás buscando refugio y el otro fue a por él en trayectoria de colisión, colisión que se proDujo a escasos metros míos y que conllevó al menos por el sonido que percibí el choque de los picos en vuelo. Lo que unido a la velocidad a la que vuelan debe suponerse que la expulsión y lucha por los territorios podría suponer daños en algunos ejemplares.
miércoles, 21 de septiembre de 2016
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