Hace pocos días comentaba que ya había detectado el movimiento migracional de las currucas capirotadas (Sylvia atricapilla) por la fachada litoral. Pues hoy nuestro amigo Paco Pellejero nos hace llegar una imagen de una curruca de esta especie muerta bajo la fachada del Museu de Ciències Naturals de Barcelona. Recordemos que esta fachada es un punto negro donde se recogen habitualmente colisiones que ya hemos documentado en este blog. Otro punto negro en Barcelona es el conjunto de edificios inteligentes (según para qué) que hay en la manzana delimitada por las calles Fluvià, Bac de Roda, Llull y Pujades. Este segundo punto ha tomado aún más trascendencia gracias a que diferentes personas al leer o ver el problema en TV me han comentado que allí encuentran pájaros muertos habitualmente, destacando curiosamente el mosquitero común (Phylloscopus collybita).
