Ayer el parc mostraba un cierto aire desangelado. El nivel del agua no ha acabado de subir por lo que se mantienen amplias zonas de cemento al aire libre. Y a pesar de ser ya propicio el espacio, tan solo había una docena de gaviotas reidoras (Larus ridibundus). En el centro del lago, solitaria, una audouin (L. audouinii) la primera del año. Parece, por lo tanto, que los ejemplares que frecuentaron estas aguas la primvera y verano pasados no las han olvidado.
Más tarde aumentó levemente el nº de reidoras, pero sin sobrepasar la treintena. Y entre ellas un adulto de gaviota cabceinegra (L. melanocephalus).
Como novedades fringílidas, una pareja de verderones comunes (Carduelis chloris) que sobrevolaban querenciados los pinos. Esta especie no ha críado nunca en el parc, aunque sí lo hace en distinas calles del distrito de Sant Martí. Y a ellos, sumar de nuevo un jilguero (C. carduelis) macho cantando desde una percha.
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