Abrimos con un titular gracioso, aunque la noticia no lo es... El miñércoles por la tarde, un joven de pocas semanas de gaviota patiamarilla (Larus michahellis), suponemos que hambriento, no tenía otroa cosa que comerse un dinosaurio de juguete, probablemente de goma... La inexperta ave, quizás llevada por alguno de sus instintos alimenticios identificaba al juguete como alimento... Recordemos que asemeja un reptil, por lo que quizás algún pequeño recodo del cerebro del ave le incitaba a deglutirlo.. Una y otra vez... Lo metía en el agua, lo mojaba y lo tragaba... No podía. Lo expulsaba de nuevo. Así estuvo media hora hasta que lo consiguió... Cuando yo abandonaba el parc, lo volvía a hacer... Supongo que el tamaño del muñeco le impedía acabar la faena... Sea por un motivo u otro, está claro que dejar este tipo de elementos de plástico en jardines y parques supone una grave peligro para las aves... Siendo tema aparte el abandonar elementos de plástico y goma, ya de por sí muy nocivos para el medio ambiente...
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