EL TRAUMATIZADO MARTÍN PESCADOR

He dejado pasar unas semanas desde la llegada del martín pescador (Alcedo atthis) invernante. Se trata del ejemplar del año pasado ya que se posa en los mismos posaderos y realiza las mismas trayectorias de vuelo que el año anterior. Cuando llega un blauet "nuevo" que desconoce el parc, se nota rápidamente por sus vuelos erráticos y posaderos variopintos. Pero con esta ave, no hay duda. Ahora bien, su comportamiento ha sido modificado traumáticamente. Hemos pasado de un ave que se dejaba ver y fotografiar con relativa facilidad a un ave temerosa que al menor atisbo vuela alarmada y no se deja ver de cerca. Y en su pata izquierda, una "novedad" científica. Una, ahora, brillante anilla metálica que en ocasiones destaca y en otras queda oculta por la posición de descanso. La brillantez de la anilla apunta a que el martín ha sido anillado hace bastante poco. Quizás,  la manipulación en el anillamiento haya modificado su comportamiento y haya tomado nota sobre esos seres de dos patas que hasta hace poco le parecían inocentes. Sea como fuera, los fotógrafos que vuelven estos días buscando la imagen del año pasado no la están obteniendo ya que el ave no permite acercarse a 30 metros. Y la única diferencia con respecto al año pasado es esa anilla brillante colocada hace pocos días.  Con esto no quiero criticar negativamente al anillamiento, un método que nos ha reportado innumerables conocimientos ornitológicos y que deberá seguir realizándose con el impulso de las nuevas tecnologías. Pero sí incidir que la manipulación de un ave en el momento de una captura puede tener consecuencias en su conducta, por cierto, un tema del que no he visto estudios. También hay que recoger que no todas las aves se comportan así cuando son anilladas. En el caso de las gaviotas, en el propio parc, las anilladas con metálicas y PVC, no huyen ante la presencia humana. Y esto puede ser debido a que su seguridad depende del concepto "bando". El estar acompañadas por otras decenas o centenas de ejemplares supone una seguridad o un "reparto" del riesgo que es asumido por el ave anillada. Veremos cuanto le dura a nuestro martín el actual terror que le supone la lejana presencia del ser humano.