Ayer por la tarde, no parecía presentarse un momento propicio para la localización de migrantes. Sol intenso y viento que hacía disminuir el número de gaviotas en el lago. Tan solo 32 gaviotas reidoras (Larus ridibundus) y 17 patiamarillas (Larus michahellis). Sumamos los habituales 17 ánsares (Anser anser) y una garceta común (Egretta garzetta), más 5 ánades reales (Anas platyrhynchos). Y obviamos 2 grandes patos blancos de granja, ya crecidos que acompañana a las ocas. Me senté unos minutos junto a las pollas de agua (Gallinula chloropus) y tan solo pude localizar al pollito de pocos días, mucho más vivaracho, reclamando inistentemente comida.... Libélulas de diferentes especies, (azules, rojas) pululaban sobre las aguas. Localicé a 4 libélulas migrantes Anax imperator. Es curioso como estos grandes depredadores mantienen zonas de caza que defienden de otros congéneres. Parecen establecerse en lugares fijos de caza que patrullan y patrullan repetitivamente a velocidad casi constante. Cuando descubren una presa, realizan una aceleración sorprendente y la capturan en la gran mayoría de los casos. Pueden comérsela en vuelo. Tan solo se posan si el peso o tamaño del depredado le obligan a ello.
Pero en cuanto a migrantes, destacar la localización de 9 papamoscas cerrojillos (Ficedula hypoleuca) -número importante para día soleado-, 3 mosquiteros musicales (Phylloscopus trochilus) y 4 currucas carrasqueñas (Sylvia cantillans). Destacar que la práctica totalidad de estos migrantes son jóvenes del año, confiados y que pueden observarse con relativa facilidad.
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